Explora la Comandancia Naval en la emblemática Torre del Oro de Sevilla

En Sevilla, una de las ciudades más hermosas de España, se encuentra una maravilla arquitectónica que se ha convertido en toda una atracción turística. Se trata de la Torre del Oro, una fortificación que data del siglo XIII y que históricamente ha servido como defensa de la ciudad en tiempos de guerra, como almacén y vigilancia del puerto fluvial. En la actualidad, es un monumento que ha sido declarado como Bien de Interés Cultural y que se considera una de las joyas arquitectónicas más importantes de la ciudad junto a la famosa Giralda.

Orígenes de la Torre del Oro

La Torre del Oro construida en el siglo XIII se encuentra ubicada a orillas del río Guadalquivir en el barrio de El Arenal. De acuerdo con las fuentes históricas, la torre servía como fortificación defensiva para proteger a la ciudad durante las invasiones musulmanas, pero también se cree que fue usada como almacén de las mercancías que llegaban a la ciudad por el río.

La torre fue levantada por orden del gobernador árabe de la ciudad, Abù l-Ulà, quien se encargó de la construcción de una serie de fortificaciones para proteger la ciudad del peligro del Guadalquivir. El objetivo principal era evitar la entrada de enemigos por el río, sobre todo tras la conquista de Sevilla por parte del rey Fernando III. A partir del siglo XVIII, la torre cambió su función militar y se convirtió en la Comandancia de Marina, un espacio que fue ocupado por la Armada española hasta épocas recientes.

La Torre del Oro y la Comandancia Naval

La Torre del Oro, desde su construcción y hasta la Guerra de la Independencia, fue utilizada como cárcel. En el siglo XVIII, se transformó en la Comandancia de Marina, un lugar donde se custodiaban los barcos de la Armada y se realizaban las tareas administrativas de la Armada española.

En 1936, con el estallido de la Guerra Civil española, la Torre del Oro se convirtió en cuartel general de la Marina Nacional. El ejército se encargó de transformar el espacio en un lugar de defensa y vigilancia, con la construcción de diversas estructuras defensivas. Con el fin de la guerra, la Torre del Oro volvió a ser utilizada como Comandancia de Marina hasta los años 80, cuando se desalojó de sus dependencias a la Armada y se propuso la construcción de un Museo Naval.

La Torre del Oro como museo

Desde 1936, la Torre del Oro ha sido transformada en diversas ocasiones. En 1944 se abrió al público como museo, con el objetivo de preservar y transmitir la historia de la ciudad y la importancia que tuvo en la navegación fluvial del Guadalquivir.

Actualmente, el Museo Naval, ubicado en la Torre del Oro, es un espacio único en el mundo que muestra la importancia que el río Guadalquivir ha tenido en la historia de España. El museo cuenta con una colección de objetos, documentos y maquetas que muestran la importancia de la navegación fluvial en la edad media. También se pueden encontrar diversas exposiciones temporales que permiten conocer la historia de la Torre del Oro y su importancia en el pasado y presente de la ciudad de Sevilla.

La Torre del Oro y su visita turística

La Torre del Oro es sin duda uno de los lugares más visitados por turistas en Sevilla. Es un destino obligado para aquellos que quieren conocer la historia de la ciudad y, en particular, su importante papel en la navegación fluvial. Además, desde su terraza se puede observar una vista panorámica impresionante de la ciudad y del río Guadalquivir que la rodea.

El acceso a la Torre del Oro tiene un coste simbólico, pero merece la pena pagar para conocerla. Se puede visitar el museo naval, las exposiciones temporales y, por supuesto, la torre, que es un edificio histórico impresionante. Además, todos los visitantes pueden disfrutar de unas vistas excepcionales desde la parte superior de la torre.

Curiosidades sobre la Torre del Oro

La Torre del Oro, además de su historia y relevancia en la ciudad de Sevilla, cuenta con algunas curiosidades que te puedes sorprender. Algunas de ellas son:

1. El nombre «Torre del Oro» no se refiere a la oportunidad de encontrar oro en su interior, sino que se debe al reflejo del sol sobre la cal y el mortero de la torre, que asemejaba al brillo del oro.
2. El río Guadalquivir fluye por debajo de la Torre del Oro, lo que la convierte en uno de los lugares más privilegiados para disfrutar de la vista del río y la ciudad.
3. A pesar de su nombre, la Torre del Oro nunca sirvió como lugar de almacenamiento de oro o joyas, como a veces se puede leer en algunas leyendas urbanas.
4. Debido a su importancia histórica y patrimonial, la Torre del Oro fue declarada Bien de Interés Cultural en 1931.

Conclusión

Bien sea para conocer la historia de la ciudad, para disfrutar de las vistas panorámicas desde su terraza o, simplemente, para conocer una de las fortalezas defensivas más emblemáticas de España, la Torre del Oro es una visita obligada para todos los turistas que visitan Sevilla. Su historia y su valor patrimonial la convierten en un lugar único en el mundo que no puede faltar en la lista de lugares por visitar en la capital andaluza.